La Iglesia Católica mantiene su misión y su presencia en la historia gracias al aporte de sus fieles. Es así como cada discípulo de Jesús se entiende parte de esa misión, poniendo a disposición tiempo, talento y dinero.
A poco de participar, cada uno de nosotros, percibe esa generosidad y llega a convertirse en motivo de alabanza a Dios y a los demás por la fecundidad del proyecto que compartimos.
Como expresión de la propia entrega todos manifestamos interés por el desarrollo de determinados proyectos, comprometiéndonos de alguna manera. Te invitamos a colaborar juntos y ser parte de los proyectos jesuitas en Mendoza.